Obras
Crítica
"...una escenografía muy limpia, audaz sin ser críptica, bien iluminada, planteó un paralelo entre la Italia sometida y con la sombra liberadora de Napoleón, y el mundo contemporáneo, de justa protesta social e iconoclasta...¿Desde cuándo hay que pedirle absoluta fidelidad a la ópera cuando —y esa es una de sus grandes virtudes— puede y debe ser revisada, reinventada, “travestida” como arte vivo que es?"
"es importante destacar la dirección de escena de Pedro Salazar, con una visión creativa logró una buena narración teatral, sin caer en grandes exageraciones ni en cosas totalmente absurdas…"
"Salazar no paró de sorprender, con una puesta en escena de múltiples y límpidos movimientos, sin exageraciones. Nada injustificado o gratuito. Todos los elementos y caracteres —bicicletas y un Volkswagen, condesas boxeadoras sin peluquines ni miriñaques— trabajó en pro de la obra maestra de Mozart y Da Ponte ubicándola en el siglo XXI."
"... la imaginación creativa de Salazar es legítima y ante ello, nadie debe sorprenderse porque la condesa entrene boxeo mientras canta, y el conde se duche y atraviese el palacio medio desnudo frente a sus sirvientes. Esas son expresiones libres que muestran la furia de los celos femeninos y la estupidez del donjuanismo."